Pasatiempo

miércoles, 30 de marzo de 2016

1.1 Concepto e importancia

En el paradigma de la gestión de empresas actual, la retribución constituye una de las herramientas de mayor importancia para la consecución de los objetivos fijados para la dirección de Recursos Humanos de cualquier compañía. En términos puramente economicistas, es indudable que la retribución a los trabajadores constituye en buen grado un porcentaje elevado de los costes totales a los que se enfrenta cualquier compañía. (Chen, H., Chen, C. H.; 2004); (Gómez-Mejía, L. R., Sánchez, G.; 2006); (Milkovich, G. T., Newman, J. M.; 1998); (Zhou, J., Martocchio, J. J.; 2001). A modo de ejemplo, en empresas de carácter industrial la retribución a los empleados puede suponer alrededor de un 60% de los costes totales de la compañía, siendo tal porcentaje superior en empresas del sector servicios, pudiendo llegar incluso a un 80% del total del presupuesto de la empresa. 

Por todo ello resulta fundamental dedicar esfuerzos al diseño de una política retributiva apropiada, asunto en el que el departamento de Recursos Humanos y su dirección jugarán un papel crucial, relacionándose estrechamente en este preciso momento los términos retribución y estrategia. Un elemento con tanto peso específico dentro del estado contable de cualquier empresa,- como lo son las retribuciones a los trabajadores-, puede significar la diferencia entre obtener ventajas competitivas y no obtenerlas, aparejándose a ello la obtención de unos mayores porcentajes de beneficio. 

Así las cosas, una adecuada gestión de las retribuciones y disponer de una política retributiva adecuada, permitirá a cualquier compañía, -en el ámbito de los Recursos Humanos-, generar oportunidades en cuatro vías interrelacionadas. La primera de ellas, en la fase de reclutamiento, posibilitando atraer trabajadores que desarrollen su trabajo con garantías para la compañía, en segundo lugar permiten mantener al personal actual y futuro motivado, integrándolo dentro del proyecto empresarial generando vinculación y con ello cultura organizacional, en tercer lugar, una adecuada gestión de las políticas retributivas debe conseguir retener a los empleados y por último permitirá a la compañía establecer una relación directa entre desempeño y objetivos estratégicos.

Con motivo de los grandes cambios sufridos en los mercados, dada su mayor complejidad, la proliferación de nuevas tecnologías de la información y el conocimiento, el crecimiento especifico del sector terciario y las nuevas exigencias de una mayor productividad y calidad, -unidas a unos niveles cada vez más altos de competitividad-, han originado una nueva orientación en el estudio e implantación de las políticas retributivas pasando de una perspectiva “micro”, basada en procedimientos, mecanismos y técnicas concretas, a una perspectiva “macro”, que se centra en el diseño y, por tanto, desarrolla una visión estratégica de la retribución.

No hay comentarios:

Publicar un comentario